La continuación de Un faro al final del mundo, una novela de adolescentes que buscan su sitio en el mundo.

Cuatro meses después del primer beso entre Max y Àlex, su relación se ha ido estancando. Ahora que han llegado las fiestas de Navidad y el cumpleaños de Max, parece que podría ser un buen momento para que el amor caliente corazones y lo ponga todo en su sitio. Pero ya se sabe que las fechas señaladas remueven más de la cuenta y en una isla poco habitada esto se hace aún más patente. La nostalgia, la soledad y los temores más íntimos afloran mientras afuera el frío y la lluvia van conquistando el terreno. Además, la llegada del hijo de las dos propietarias del hotel del faro, un chico atractivo y misterioso, supondrá un detonante para el grupo de adolescentes de la isla. Mientras Max se distancia de él, Álex irá descubriendo el mundo del deseo a través de las redes y de este recién llegado, un adolescente con una esquina oscura que desquiciará a los jóvenes de la isla para siempre.

Cuando el amor más tierno e inocente da paso al deseo, ¿cuáles son los miedos y límites que nos paralizan?